En el Conurbano Bonaerense se fomenta y se festeja en demasía la autogestión o propiamente dicho la gestión independiente en el ámbito cultural. Si bien en todo el mundo hay artistas movilizándose de manera independiente, la tracción y necesidad de las bandas que recorren el territorio argentino convierte con dedicación al hobby en trabajo. Picnic al Costado del Camino es un quinteto de indie procedente del oeste bonaerense y más que una banda ya es una PyME que se dedica al cien por cien en su música y la organización de su propio festival; Indie Mamón, que crece exponencialmente con cada edición y requiere una demanda mayor de cada integrante.
La música de Picnic lleva de base el indie rock, pero con una mutación que varía en cada canción a lo largo de los 6 años del grupo. Su reciente lanzamiento de larga duración, “Primer Día”, que está viviendo su primer aniversario, se empapa de sintetizadores y teclados que llevan lo vivaz y la tranquilidad del indie hasta lo onírico. Cuando prende el rec median sobresaltos que incitan a lo bailable, pero nada exaltante por de más, ya que los movimientos los guían suaves melodías de saxo que equilibran la balanza sonora perfectamente.
En el contexto que desarrollan los bellos acontecimientos del aniversario de su segundo LP y la ejecución de una nueva edición del Indie Mamón pudimos intercambiar una pequeña y amena charla con el quinteto:
Primer Día está con su primer año recién cumplido ¿toman su show en el festival como una celebración de eso también?
Podría decirse que todos los shows de la banda son una celebración de la música que hacemos. Este año presentamos dos singles nuevos y nos gusta poder darle lugar a la música nueva, sin dejar de celebrar «Primer Día» y las canciones anteriores a ese disco.
Pasaron 5 años (y un pequeño EP de por medio) entre un disco y otro ¿Cuál creen que es el cambio más significativo en ustedes durante el impasse que tuvieron?
Todos los miembros crecimos musicalmente y como personas lo que hizo que naturalmente se refleje en el resultado final de la música. Sin duda nos volvimos más obsesivos a nivel musical sin perder la sensibilidad que caracteriza nuestras canciones.
¿Hasta dónde llega la búsqueda musical de los Picnic? ¿Llega el momento en el que dicen hay que expandir nuestros horizontes musicales o suelen ser más apegados a los sonidos acérrimos al suyo?
No hay límites. Nunca nos encasillamos en un género o una línea en particular. Tenemos influencias diferentes, inspiraciones diversas. No nos censuramos. Hacemos la música que queremos en el momento que nos encontramos. Siempre va a haber algo que se mantiene a través de los años aunque los sonidos o las composiciones cambien.
Luego de tres ediciones con mucho laburo por detrás y ya curtidos en el tema ¿Qué desafíos les plantea hoy día el festival?
El mayor desafío es dejar el papel de artista por un rato y meterse de lleno en la producción del evento. Si bien dentro del equipo de producción entran a jugar otras personas que son fundamentales para el desarrollo del evento, nosotros como miembros de la banda estamos a la cabeza de todo. Hay que saber separar los dos mundos.
¿Cuál es su sueño sobre el futuro del Indie Mamón?
Nuestro sueño sobre el futuro del festival es que cada edición crezca un poco más que la anterior hasta estar a la par con festivales de primera línea.
La gente seguro espera un fiestón y su visión como organizadores ya la tenemos pero ¿Qué es lo que se esperan como banda de la fecha?
Como banda y como artistas esperamos poder transmitir lo que nosotros sentimos a la hora de tocar. El entusiasmo que genera poder tocar en un escenario de esta índole es indisimulable. No tenemos duda que esta edición va a ser una fiesta como todas las anteriores y nos deja impacientes por subir al escenario a disfrutar.
Picnic al costado del camino con varios motivos para el festejo y gran dedicación aprovechan la situación para presentarse este 24 de mayo en el marco de su propio festival Indie Mamón junto a otras bandas como Revistas, WRRN, Neokira y muchas más de la nueva escena rockera, en el Auditorio Oeste, Haedo. El festejo está asegurado y todas las condiciones están dadas para que se celebre como un gran cumpleaños.
